
Un nuevo trabajo de neurocientíficos alemanes arroja luz sobre las causas de una afección, la fibromialgia, que se caracteriza por un dolor recurrente, entre otros síntomas como trastornos del sueño, fatiga crónica, ánimo depresivo y problemas digestivos. Han descubierto amplios cambios funcionales y estructurales de las redes neuronales moduladoras del dolor, especialmente en las áreas cerebrales prefrontal, cingulada y límbica.
El objetivo del estudio que publicita NeuroImage: Clinical fue explorar la modulación neural del dolor experimental inducido a través del control experimentado en fibromialgia y descubrir posibles cambios específicos de la condición en comparación con personas sanas.
En la Clínica de Medicina Psicosomática y Psicoterapia de la Universidad Ruhr de Bochum (Alemania), un equipo de científicos, dirigidos por el profesor Martin Diers, proporciona evidencia de que ciertas áreas del cerebro involucradas en el procesamiento del dolor no funcionan normalmente en pacientes con fibromialgia. Encontraron que estas áreas del cerebro mostraron actividad alterada en estos pacientes.
Estos investigadores estiman que el 2% de la población alemana padece fibromialgia y, de este porcentaje, el 90% son mujeres. Como promedio, se tarda unos 16 años en un diagnóstico correcto.
El grado en que experimentamos el dolor y la restricción que provoca dependen en gran medida de cómo lo percibimos. Si tenemos la sensación de que podemos controlar el dolor y apagarlo nosotros mismos, por ejemplo, lo toleraremos mejor que si nos sentimos a su merced.
“Para las personas con dolor crónico, la incapacidad de controlar los ataques repetidos es una de las causas más importantes del deterioro de la calidad de vida”, destaca Benjamin Mosch, autor principal del estudio. “Y, sin embargo, -añade- los mecanismos neuronales subyacentes hasta ahora se han estudiado principalmente en controles sanos”.
Recursos cognitivos deteriorados
Los científicos compararon dos grupos de mujeres: 21 voluntarias sanas y 23 pacientes diagnosticadas con fibromialgia. Ambos grupos se expusieron al dolor por calor mientras sus actividades cerebrales se monitoreaban con resonancia magnética funcional.
Pudieron detener el estímulo del dolor por sí mismas. Una plataforma informática controló el inicio y el final del estímulo.
Cuando las participantes del grupo de control sano pudieron terminar el estímulo del dolor por sí mismas, se activaron varias áreas cerebrales, principalmente frontales, que parecen desempeñar un papel importante en la modulación del dolor.
Esta observación es consistente en estudios previos con sujetos sanos. “Curiosamente, no detectamos ninguna activación de este tipo en nuestro grupo de pacientes”, explica Martin Diers.
“Esto puede servir como evidencia de procesamiento de dolor deteriorado entre pacientes con fibromialgia. Indica que los recursos cognitivos para lidiar con el dolor agudo están deteriorados en estos pacientes”, añade finalmente.
Dolor recurrente en fibromialgia
La fibromialgia es un trastorno caracterizado por dolor musculoesquelético generalizado acompañado por fatiga y problemas de sueño, memoria y estado de ánimo. Para Mayo Clinic, posiblemente la fibromialgia amplifica las sensaciones de dolor, porque afecta el modo en que el cerebro y la médula espinal procesan las señales de dolor y no dolor.
Los síntomas a menudo comienzan después de un evento, como un traumatismo físico, cirugía, infección o estrés psicológico significativo. En otros casos, los síntomas se acumulan progresivamente con el tiempo, sin que exista un evento desencadenante.
Las mujeres son más propensas que los hombres a desarrollar fibromialgia. Muchas personas con esta dolencia también tienen dolores de cabeza tensionales, trastornos de la articulación temporomandibular, síndrome de colon irritable, ansiedad y depresión.
Si bien no existe una cura para la fibromialgia, hay varios medicamentos que pueden ayudar a controlar los síntomas. El ejercicio, la relajación y las medidas para reducir el estrés también pueden ayudar.
Los síntomas principales de la fibromialgia incluyen:
- Dolor generalizado. El dolor asociado con la fibromialgia muchas veces se describe como un dolor leve, molesto y constante, que dura al menos tres meses. Para que se considere generalizado, debes sentir dolor en ambos lados del cuerpo, y por encima y por debajo de la cintura.
- Fatiga. Las personas que padecen fibromialgia con frecuencia se despiertan cansadas, aunque a la vez manifiestan que duermen mucho. Con frecuencia, el sueño se interrumpe por el dolor, y muchos pacientes con fibromialgia tienen otros trastornos del sueño, como síndrome de las piernas inquietas y apnea del sueño.
- Dificultades cognitivas. Un síntoma comúnmente llamado fibroniebla dificulta la capacidad de enfoque, atención y concentración mental.