
A pesar de su tratamiento para la presión arterial alta, aproximadamente uno de cada cinco adultos hipertensos (un factor de riesgo principal de enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular) también toma un medicamento que podría elevar su tensión. Esta es la principal conclusión de un trabajo publicado en JACC (revista del Colegio Americano de Cardiología), expuesto en la 70 reunión del American College of Cardiology.
Es necesario pues que, en estas situaciones, los pacientes revisen de forma rutinaria con su médico todos los fármacos que toman, incluidos los que no necesitan receta, para asegurarse de que no interfiere con las pautas que sigue para bajar la tensión.
Según este estudio, las tres clases de medicamentos más comunes fueron los antidepresivos, antiinflamatorios no esteroides (AINE) que incluyen ibuprofeno y naproxeno, y esteroides orales utilizados para tratar afecciones como gota, lupus, artritis reumatoide o después de un trasplante de órganos.
Estos fármacos se informaron por el 9%, 7% y 2%, respectivamente, de los voluntarios en este trabajo. También se reconocieron otros medicamentos asociados con la elevación de la presión arterial, como los antipsicóticos, ciertos anticonceptivos orales y descongestionantes.
Estos hallazgos generan preocupación, especialmente porque casi la mitad de los estadounidenses diagnosticados con presión arterial alta no la tienen suficientemente controlada. Así, el doctor John Vitarello, del Beth Israel Deaconess Medical Center, en Boston, y autor principal del estudio, recuerda que la presión arterial objetivo para los pacientes con hipertensión es una lectura de menos de 130 mmHg por encima de 80 mmHg, según la Guía para la prevención, detección, evaluación y manejo de la hipertensión arterial en adultos.
Incompatibilidad de fármacos en hipertensos
El estudio examinó datos de un total de 27.599 participantes en la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición (NHANES), entre los años 2009 y 2018. De estos, aproximadamente la mitad (49%) eren hipertensos (edad promedio de 55 años, 48% mujeres.
Los investigadores identificaron los medicamentos asociados con la elevación de la presión arterial según los enumerados en la guía ACC / AHA y examinaron el uso de estos fármacos por parte de adultos con hipertensión por encima y por debajo de los objetivos de las cifras tensionales recomendadas.
Entre los participantes hipertensos, el 19% reconoció haber tomado uno o más medicamentos fuera del tratamiento recomendado con lo que aumentaron su presión arterial y el 4% ingirió varios.
Casi una cuarta parte (24%) de las mujeres con presión arterial alta dijeron que tomaban uno de los medicamentos que les aumentaba la presión arterial, en comparación con el 14% de los hombres. Los adultos mayores tenían más probabilidades de hacerlo que los adultos más jóvenes (19% de los participantes mayores de 65 años frente al 18% de los participantes menores de 65 años).
El doctor Vitarello señala que estos hallazgos sugieren que, en algunos casos, en lugar de tratar la presión arterial alta con más medicamentos, puede haber oportunidades para reducir las cifras al prescribir o sustituir fármacos más seguros.
Por ejemplo, puede haber otras clases de medicamentos para tratar la misma afección que tienen menos impacto en la presión arterial. Sin embargo, hay algunos pacientes que pueden no tener otra opción de medicación, por lo que es recomendable vigilar más de cerca su presión arterial y hablar con su médico antes de suspender o comenzar a tomar medicamentos.