Las bacterias del complejo Acinetobacter ACB, que se adquieren con frecuencia en entornos hospitalarios, también se pueden encontrar en la carne cruda, según un estudio realizado por científicos españoles del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), realizado con muestras de los mercados de Lima.
Aunque los aislamientos fueron susceptibles a la mayoría de los antibióticos, los resultados de la investigación publicada en Journal of Food Microbiology sugieren que la carne cruda puede actuar como reservorio para estas bacterias patógenas.
Entre las bacterias de la familia Acinetobacter, las que pertenecen al complejo ACB (Acinetobacter Calcoaceticus Baumannii) se han convertido en una amenaza importante en los hospitales debido a su capacidad para adquirir resistencia a múltiples medicamentos antimicrobianos y desinfectantes, y para sobrevivir en entornos hospitalarios.
Sin embargo, también se han encontrado especies patógenas de Acinetobacter en alimentos y animales productores de alimentos, lo que podría representar un reservorio y una fuente de infección para los humanos.
Carne cruda de vacuno, porcino y aves infectada por bacterias
Este estudio analizó las bacterias recuperadas de 138 muestras de carne de aves de corral, porcino y vacuno, seleccionadas al azar de seis mercados tradicionales en Lima.
Los autores obtuvieron 12 aislamientos de Acinetobacter de cinco muestras diferentes de carne de res, vendidas en dos mercados independientes. Todos menos uno pertenecían al complejo ACB: nueve eran Acinetobacter pittii, uno A. baumannii y uno era A. dijkshoorniae, una especie recientemente descrita por el mismo grupo de investigación. De hecho, esta es la primera vez que este último se identifica en muestras de carne en Perú.
Los resultados subrayan el hecho de que muchos microbios que infectan a los humanos también pueden transmitirse a través de alimentos contaminados.
