Expertos del Instituto Federal Alemán para la Evaluación de Riesgos (BfR) han dado la voz de alarma coincidiendo con la profusión de campañas publicitarias de maquillajes, cremas y champús en Europa.
Los especialistas de este Instituto alemán encienden la luz roja en BfR-Stellungnahmen para recordar, fundamentalmente a las empresas fabricantes de estos productos, que extremen las precauciones con el fin de eliminar todo tipo de agentes patógenos.
Y es que, desde su introducción en 2005, un número cada vez mayor de productos que presentan un riesgo microbiológico se notificaron a través del Sistema Europeo de Alerta Rápida para Productos de Consumo Safety Gate (antes RAPEX). Diez productos cosméticos enumerados en la base de datos RAPEX se vieron afectados por una contaminación confirmada con P. gergoviae.
Como recuerda el investigador británico Edward Cunningham-Oakes, de la Universidad de Cardiff, en su estudio publicado el pasado mes de febrero en el órgano oficial de la Asociación Americana de Microbiología, esta bacteria pertenece a la familia Enterobacteriaceae que, ocasionalmente, se asocia con la infección humana, pero comúnmente se asocia con deterioro cosmético.
En estudios anteriores, este científico demostró que las cepas industriales de Pseudomonas aeruginosa tienen de forma única grandes segmentos de ADN conocidos como megaplasmidos, que confieren capacidad genómica adicional con más de medio millar de genes y, por lo tanto, pueden desempeñar un papel en la resistencia a los conservantes.
Además, los estudios con cepas de Pluralibacter y otras Gram negativas han demostrado que existen vínculos claros entre la resistencia a los conservantes y las modificaciones de la membrana externa. Los cambios genéticos que sustentan estos mecanismos de resistencia no se comprenden bien, pero se pueden dilucidar con los avances de la genómica.
Cremas y maquillajes libres de ‘P. gergoviae’
Ahora, el BfR asegura que si se utilizan productos contaminados con P. gergoviae, la bacteria puede introducirse en el organismo a través de heridas abiertas o de las membranas mucosas. Esta posibilidad se puede traducir en el desarrollo de infecciones graves en personas inmunocomprometidas.
Es conveniente recordar que las autoridades federales estadounidenses en materia de sanidad (Food and Drug Administration) emitieron una carta de advertencia en 2016 a un fabricante de gel de ducha, champú y acondicionador después de que se encontrara un nivel excesivo de microorganismos en sus productos.
Uno de estos agentes patógenos fue a Pluralibacter gergoviae. En la carta de advertencia, la FDA explicaba que “P. gergoviae forma parte de la flora intestinal normal y puede considerarse un patógeno oportunista. Las personas con sistemas inmunitarios debilitados, que padecen una enfermedad preexistente grave, que han sido tratadas quirúrgicamente o pertenecen a otro grupo sensible de personas, corren un riesgo particular de infección”.
Así pues, los expertos germanos de BfR hacen hincapié en que los productos cosméticos aplicados externamente deben estar libres de P. gergoviae para evitar un riesgo para la salud humana.
En este punto, esta corporación aclara que, de momento, los riesgos para la salud asociados con el uso de productos cosméticos como maquillajes o cremas no se pueden cuantificar actualmente debido a la falta de datos fiables.
El Instituto Federal Alemán para la Evaluación de Riesgos (BfR) es una institución científicamente independiente dentro del organigrama del Ministerio Federal de Alimentación y Agricultura.
Asesora al Gobierno federal alemán y a los laender sobre cuestiones de seguridad alimentaria, química y de productos. El BfR realiza su propia investigación sobre temas que están estrechamente relacionados con sus tareas de evaluación.