El metacinabrio, un sulfuro de mercurio en fase cristalina negra inusual, ha invadido algunas de las 1.119 páginas del Codex Atlanticus, original de Leonardo Da Vinci, de los siglos XIV y XV. Investigadores italianos del Politécnico de Milán aseguran que la aparición de manchas negras, por ejemplo en la página 843, se debe a los restauradores que trabajaron en esta obra, durante el siglo pasado.

El Codex Atlanticus es una de las colecciones más extensas y deslumbrantes de dibujos y textos descriptivos de Leonardo da Vinci que, en 12 tomos, contiene un total de 1.119 páginas. Se conserva en la Biblioteca Ambrosiana, en Milán (Italia).
Contiene dibujos y textos manuscritos de Leonardo da Vinci sobre ingenios para volar, botánica, instrumentos musicales y armamento, entre otros temas, que realizó entre 1478 y 1519, año en el que murió.
Este innovador trabajo que difunde Scientific Reports lo ha coordinado y dirigido la profesora Lucía Toniolo, acreditada especialista en ciencia y tecnología de los materiales del Politécnico de Milán.
El equipo de la profesora Toniolo utilizó una serie de avanzadas técnicas de análisis no invasivas y microinvasivas en su investigación para, de esta forma, estudiar y analizar su naturaleza y causas.
Restauración del ‘Codex Atlanticus’
El Codex Atlanticus, donado a la Veneranda Biblioteca Ambrosiana en 1637, fue objeto de una importante restauración llevada a cabo por el Laboratorio del Libro Antico de la Abadía de Grottaferrata, entre los años 1962 y 1972.
La intervención terminó con la producción de una docena de volúmenes con un total de 1.119 folios. Cada página tiene un paspartú con un panel (añadido por los monjes restauradores en Grottaferrata), que enmarca los fragmentos originales de Leonardo da Vinci.
Desde el año 1997, el Codex se almacena en un ambiente con un microclima estrictamente controlado, de acuerdo con las normas de conservación del papel.
En esta cronología de datos, resaltar también que, en 2006, se descubrieron manchas negras muy pequeñas en el paspartú, situadas alrededor del panel que enmarca y encuaderna el folio.
Este fenómeno de ennegrecimiento, observado en unas 210 páginas del Codex Atlanticus desde el folio 600 en adelante, causó gran preocupación entre conservadores de museos y académicos.
Una intervención inicial en 2009 condujo a la desvinculación de los volúmenes. Hoy, los dibujos se montan individualmente en paspartús, en carpetas y cajas libres de ácido.
Esta investigación, realizada por el Politécnico de Milán, comenzó en 2021 durante un proyecto piloto inicial, sobre tres dibujos del Codex, financiado por el Fondo Italiano di Investimento, que incluyó la extracción y sustitución del paspartú del folio 843.
Estudios previos habían descartado que las manchas fueran el resultado de procesos de deterioro microbiológico. La investigación realizada por el Politecnico di Milano, que combina imágenes de fotoluminiscencia hiperespectral e imágenes de fluorescencia UV con imágenes micro-ATR-IR, reveló la presencia de pegamento de almidón y pegamento de vinilo en las áreas donde la tinción está más concentrada, justo cerca del borde del folio mencionado.
ESRF, la prueba definitiva
Además, el equipo de la profesora Lucía Toniolo detectó nanopartículas inorgánicas redondas, de entre 100 y 200 nanómetros de diámetro, compuestas por mercurio y azufre, que se habían acumulado dentro de las cavidades formadas entre las fibras de celulosa del papel paspartú.
Finalmente, mediante el análisis de sincrotrón, realizado en las instalaciones del European Synchrotron Radiation Facility (ESRF), en Grenoble (Francia), los investigadores pudieron identificar estas partículas como metacinabrio, un sulfuro de mercurio en una fase cristalina negra inusual.
Paralelamente, estudios en profundidad sobre los métodos de conservación del papel les han permitido formular algunas hipótesis sobre la formación de metacinabrio.
La presencia de mercurio podría asociarse a la adición de una sal antivegetativa en la mezcla de cola utilizada en las técnicas de restauración de Grottaferrata que -según ponen de manifiesto- se podría haber aplicado solo en determinadas zonas del papel paspartú; precisamente donde sujeta el folio de Leonardo, para asegurar la adherencia y prevenir infestaciones microbiológicas en el Codex.
La presencia de azufre, por otro lado, se ha relacionado con la contaminación del aire (en Milán en la década de 1970, los niveles de dióxido de azufre (SO2) eran muy elevados) o a los aditivos utilizados en la cola que, con el tiempo, habrían provocado una reacción con las sales de mercurio y la formación de partículas de metacinabrio, responsables de la aparición de esas manchas negras.