![oceanos-virus Hallan 200.000 nuevos virus en el mar](https://biotechmagazineandnews.com/wp-content/uploads/2019/06/oceanos-virus-696x464.jpg)
Un grupo de exploradores y científicos de varios países, dirigidos por Matthew Sullivan, microbiólogo de la Universidad estadounidense de Ohio, ha descubierto más de 200.000 nuevos virus en el mar, según el estudio que han publicado en Cell.
Los investigadores permanecieron durante cuatro años a bordo de la goleta Tara Oceans, recorriendo todos los océanos para tomar muestras de sus aguas a distintas profundidades.
Sullivan destaca que “los microbios de los océanos absorben la mitad del dióxido de carbono que emitimos las personas a la atmósfera”. En su opinión, “los virus probablemente controlan este proceso que mitiga el impacto climático de los humanos. Necesitamos entenderlos para no cortocircuitar su actividad”, resalta.
El trabajo se basa en los datos recogidos durante la expedición Tara Oceans, llevada a cabo entre 2009 y 2013 a bordo de una goleta de casco de aluminio que recorrió todos los océanos del planeta tomando muestras de agua a diferentes profundidades. Los resultados presentan 12 veces más virus nuevos que los identificados hasta ahora, precisamente durante una expedición previa del mismo barco.
Siempre según las conclusiones de este estudio, los nuevos virus marinos están distribuidos entre los océanos Ártico, Antártico, las aguas superficiales y templadas cercanas a los trópicos, las capas intermedidas a profundidades de entre 150 metros y 1.000 metros y las zonas más profundas hasta llegar al fondo marino.
Expedición española Malaspina: más que virus en el mar
La expedición española Malaspina recogió, con el buque oceanográfico Hespérides, agentes patógenos hasta cuatro mil metros de profundidad entre los años 2010 y 2011.
Durante siete meses investigadores y marineros de la Armada cruzaron los océanos Atlántico, Indico y Pacífico en un trayecto que recaló en Rio de Janeiro, Ciudad del Cabo, Freemantle, Sidney, Auckland, Honolulu y Cartagena de Indias.
Esta expedición fue mucho más ambiciosa que estudiar la fauna microbiana, ya que investigaron en profundidad aspectos como la oceanografía física, la óptica oceánica, la biogeoquímica, el papel de la deposición atmosférica, la presencia de contaminantes, la biodiversidad y procesos metabólicos y la estructura y función de las comunidades fitoplanctónicas y zooplanctónicas.