Una persona infiel con su pareja es significativamente más propensa a tener mala conducta en su trabajo, según un estudio publicado en PNAS.
Los investigadores observaron los registros de oficiales de policía, asesores financieros, delincuentes de cuello blanco y altos ejecutivos que utilizaron el sitio web de infidelidad conyugal Ashley Madison. Operando bajo el lema La vida es corta. Tenga una aventura, Ashley Madison se anuncia como servicio de citas para que las personas casadas tengan «encuentros discretos».
A pesar de las promesas de discreción, los datos fueron hackeados y publicados en 2015. Afectaron a unas 36 millones de cuentas de usuarios, incluidas un millón de cuentas de pago en Estados Unidos.
La investigación realizada por John Griffin y Samuen Kruger, de la Facultad de Finanzas de McCombs de Texas, junto con Gonzalo Maturana, de la Universidad de Emory, descubrió que los usuarios de Ashley Madison en los entornos profesionales que estudiaron eran más del doble.
«Este es el primer estudio que analiza si existe una correlación entre la infidelidad personal y la conducta profesional, y encontramos una fuerte correlación«, apunta Kruger.
Datos de diversas fuentes oficiales
Investigaron cuatro ámbitos con un total de 11.235 personas. Y para ello utilizaron datos oficiales del Proyecto de Datos de la Policía Ciudadana, datos sobre asesores financieros de BrokerCheck de la Autoridad Reguladora de la Industria Financiera, otros sobre acusados en casos SEC de los archivos de liberación de litigios de la Comisión de Valores y Bolsa, y datos sobre CEOs y CFOs de Execucomp.
Después de analizar a los profesionales con mala y buena conducta con edades, géneros y experiencias similares y controlar una amplia gama de variables ejecutivas y culturales, los investigadores descubrieron que las personas con antecedentes de mala conducta tenían muchas más probabilidades de engañar a sus cónyuges.
Sus hallazgos sugieren una fuerte conexión entre las acciones de las personas en su vida personal y profesional y respaldan la idea de que eliminar la conducta sexual inapropiada del infiel en el lugar de trabajo también puede reducir la actividad fraudulenta.
«Nuestros resultados muestran que la conducta sexual personal y está correlacionada con la conducta profesional», asegura Kruger, que sugiere que “eliminar la conducta sexual inapropiada en el lugar de trabajo podría tener el beneficio adicional de contribuir a culturas corporativas más éticas en general».