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Piden prudencia con los productos de cannabidiol

Piden precaución con los productos de cannabidiol

Una revisión reconoce que hay evidencia preclínica y clínica que sugiere que los aceites de CBD pueden ser prometedores para tratar afecciones como el dolor crónico y la adicción a los opioides. Sin embargo, matiza, son aún pocos los estudios clínicos sobre su seguridad y eficacia. Foto: jcomp / Freepik

Los aceites y productos de cannabidiol (CBD) son cada vez más populares entre los consumidores para aliviar dolores, ansiedad, trastornos del sueño y otros problemas crónicos. Pero, ¿son seguros?

Una revisión de las últimas investigaciones, publicada en Mayo Clinic Proceedings, reconoce que hay evidencia preclínica y clínica que sugiere que los aceites de CBD pueden ser prometedores para tratar afecciones como el dolor crónico y la adicción a los opioides.

Pero, matiza, son pocos los estudios clínicos sobre la seguridad y eficacia del CBD, y “se necesita más investigación con humanos antes de que los clínicos puedan decir definitivamente que son útiles y seguros”.

El doctor Brent Bauer, director de Investigación de Mayo Clinic, explica que «hay muchos hallazgos interesantes en los estudios preclínicos que sugieren que los productos de cannabidiol y el aceite de cáñamo tienen efectos antiinflamatorios y pueden ser útiles para mejorar el sueño y la ansiedad. Pero los ensayos en humanos aún son limitados, por lo que es demasiado pronto para ser definitivo sobre la eficacia y la seguridad».

Interés por el CBD para el alivio del dolor crónico

El doctor Bauer destaca que hay motivos para preocuparse por un número creciente de informes de lesiones hepáticas en pacientes que han usado productos de cannabidiol. Con el creciente interés del paciente por estos productos, “es importante que la investigación clínica avance para comprender mejor su valor y seguridad potenciales”, añade.

En este sentido, dice también que «la selección de un producto para el cuidado de la salud es crucial y, aunque estos no cuentan con la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) para uso terapéutico, los pacientes continúan pidiéndolos y usándolos. Los médicos deben estar mejor informados sobre estos productos y es importante que en los ensayos en humanos se examinen cuestiones de eficacia y seguridad».

Cortesía de Red de noticias de Mayo Clinic.

La legalización de la marihuana con fines medicinales ha despertado un gran interés por parte de los consumidores en productos de venta libre que contienen CBD y aceite de cáñamo, especialmente para el alivio del dolor crónico.

Con el CBD como tendencia de consumo popular, a los médicos les puede resultar fácil descartarlos si no están aprobados por las autoridades sanitarias. El doctor Bauer alienta a los clínicos para que aprendan lo máximo posible sobre ello y desarrollen experiencia sobre estos productos, al tiempo que les sugiere que se tomen en serio el interés de sus pacientes.

Posibles interacciones de productos de cannabidiol con otros fármacos

Según este trabajo, no se han realizado estudios de seguridad rigurosos sobre los aceites de CBD de «espectro completo», que contienen una variedad de compuestos que se encuentran en la planta de cáñamo.

La doctora Karen Mauck, internista en Mayo Clinic y una de los autores de esta revisión, matiza que hay distinciones importantes entre la marihuana, el cáñamo y los diferentes componentes del CBD y el aceite de cáñamo.

«Aparte de Epidiolex, una forma purificada de CBD derivado de plantas que fue aprobado en 2018 para el tratamiento de formas graves de epilepsia, todas las demás formas de CBD no tienen la aprobación de la FDA, pero se venden en una variedad de formulaciones que incluyen aceites orales o tópicos, cremas, aerosoles y tabletas», reconoce la doctora Mauck.

Estos productos, accesibles a los consumidores en EE UU, «contienen cantidades variables de CBD, pueden tener otros compuestos activos y también imprecisiones en el etiquetado”, advierte la investigadora. Por eso, antes de usar productos de cannabidiol o aceites de cáñamo, “es importante consultar con su médico acerca de posibles efectos secundarios e interacciones con otros medicamentos«, alerta la doctora Mauck.

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